Violencia en el noviazgo

Violencia en el noviazgo

            En este ensayo hablaremos sobre la culpabilidad que las mujeres adquieren ante  la violencia que ejecuta el hombre, siendo ellos los principales agresores dentro de un  noviazgo violento.Desde los inicios de la humanidad a la mujer ha sido tratada con menos respeto que al hombre, para cualquier actividad o situación siempre era excluida, sus únicos deberes eran cuidar del hogar y la familia. Con el paso de los años esta situación ha cambiado sólo un poco, sin embargo la discriminación y violencia hacia las mujeres es el mismo. El machismo es una situación muy preocupante, el hombre se siente superior, todo un protagonista, al que deben atenderle y servirle y  por supuesto ve a la mujer como un objeto de servicio y de sexo. Hoy en día la mujer puede expresarse libremente, tiene acceso a la educación , a realizar las mismas actividades que el hombre , es capaz de poder tomar sus propias decisiones sin que un hombre la reprima y a pesar de todo esto , la violencia aún se permite.

           La violencia en el noviazgo, es un problema que viven un gran porcentaje de jóvenes, entre 18 y 24 años de edad. Éste, es un ataque intencional de tipo psicológico, sexual, o físico, siendo la mayoría de las mujeres víctimas de estos casos. Esto las ha llevado, en muchos de los casos hasta la muerte.

Algunas de las causas que propician la violencia dentro del noviazgo pueden ser: obsesión por parte del hombre hacia la mujer, desconfianza, inseguridad, problemas económicos, problemas familiares, odio, celos, sentimiento de inferioridad hacia la pareja, fuertes discusiones y falta de respeto. Son muchas de estas acciones las que se pasan por alto, sólo no haciéndolo podremos identificar claramente los signos de violencia en el noviazgo y saber si a veces es bueno o malo continuar con una relación. 

   
            Tesis de este ensayo: La violencia en el noviazgo es principalmente ejercida por los hombres y permitida por las mujeres.   Para fundamentar esta tesis tenemos varias argumentos de los que nos hemos percatado en el día a día de nuestra sociedad mexicana, empezaremos con la mención de baja autoestima de la mujer, esto se manifiesta cuando las mujeres creen no ser valiosas, cuando elevan al hombre a un trono de perfección, y suelen incluso justificar las agresiones ejercidas sobre ellas con frases que demuestran la manera en que se menosprecian ante el sexo masculino. Hemos escuchado frases como : “Yo lo provoque”, la segunda “Es mi culpa”, y una tercera que es de las peores:“No hago nada bien, me lo merezco” y si sumamos el machismo de nuestra sociedad tenemos la siguiente:“Él es hombre y así  reacciona”.

Haciendo mención de otra razón por la cual sostenemos nuestra tesis es que en la sociedad mexicana lamentablemente aun se crían a los niños como “machitos” como reyes, como los jefes del hogar, siendo esto un arma de doble filo para la sociedad, pues los niños machitos en unos años serán hombres quienes agredirán a sus esposas, creyendo tener el derecho de hacerlo simplemente por ser “machos”.

                   Lamentablemente estas situaciones orillan a la mujer a pensar que lo que viven es normal y se lo merecen, y no se dan cuenta de tal equivocación pues como sabemos hombres y mujeres valemos por igual.    Muchas veces ellas pasan por alto las agresiones porque el hombre va de poco en poco, comienza con palabras ofensivas hasta llegar a los golpes, entre ellas, excusándose o disculpándose  diciendo: ‘‘no lo vuelvo a hacer’’, es decir, la mujer ha tenido la autoridad y el poder de detener al agresor de antes de ser atacada físicamente o de manera fatal psicológicamente, con lo que deducimos que la mujer no pone un alto cuando tiene la oportunidad, puede ser por ignorancia dependiendo también de la entidad en la que vivan, que su cultura permita la violencia, o bien parte de la vida en matrimonio, lo que genera un erróneo ejemplo en generaciones futuras, y en situaciones en las que la mujer vive alrededor de miles de fuentes de información sobre la violencia hacia su género, entonces es ahí cuando recae en ella cierta culpabilidad por seguir con una relación violenta, pues al primer signo de agresión debemos poner un alto y así nos evitamos todos los hechos que de un “pequeño insulto” se desencadenan, temibles golpes así que ante hechos.

Debemos de dar alerta a nuestros sentidos tanto la víctima, como las personas que la rodeamos y evitar que este hecho termine de manera fatal.

               Concluimos que el noviazgo es una relación que comprende amor, confianza , tolerancia y sobre todo respeto, no importa el sexo ni estatus social; cuando llega a aparecer la violencia, es porque todos esos requisitos indispensables simplemente ya no existen. El machismo y el sometimiento tienen una participación importante dentro de éste problema, imposibilitando la manera de hacer cambiar la manera de pensar de los dos. Pero con información, ayuda de los familiares y amigos, hay esperanza, por que la mujer siempre necesitará ayuda de los seres que la aman para poder salir victoriosa de cualquier batalla.